‘El valor de la comunicació educativa més enllà del whats, insta o snap chat’
Montserrat Jiménez es licenciada en filología anglogermánica, vinculada a la educación dentro del proyecto Vedruna Catalunya Educació. Como ella nos comparte «he tenido la posibilidad de ser todas las piezas del tablero: profesora, jefa de estudios, directora y actualmente formadora de docentes, sin dejar nunca el aula».
La posibilidad de ser parte del grupo de innovación y formación de una institución que cuenta con 36 centros, le permite acompañar a docentes en el proceso de cambio, tan necesario en la actualidad.
Es una apasionada de su trabajo que «me ocupa, me preocupa y me hace repensar mi trabajo diariamente”. Es una persona inquieta que aprende cada día en el aula “los alumnos son un feedback inexorable de lo que hacemos, somos y proyectamos».
Le gusta decir que es de humanidades, lejos de tener un perfil tecnológico, ha incorporado la tecnología en su práctica docente como medio al servicio de la pedagogía, y no a la inversa, “a menudo digo que hay que poner corazón a la tecnología”.
Ha participado en multitud de congresos, destaca su etapa del 2010 al 2015 como directora de la Escola Vedruna de Ripoll por todo lo realizado para tejer vínculos con la comunidad, el entorno y el pueblo, ya que no concibe la escuela como un ente aislado. Por otro lado todo el recorrido realizado dentro de la innovación pedagógica y el cambio educativo. Y también por un tema muy personal que ha sido la aportación que junto a Eva Bach están realizando en el mundo educativo tras los desafortunados acontecimientos que nuestra ciudad vivió el 17 de Agosto 2017.
Unos meses antes, junto con Eva Bach ya estaban trabajando para desarrollar un proyecto vinculado a la ‘Comunicación educativa’. Por la vinculación personal y profesional de Montserrat Jiménez en Ripoll, le sugirió a Eva Bach realizar su primera intervención. Y se preguntaron ¿qué tenemos que comunicar a los jóvenes primero de Ripoll y también a los de Cataluña, después de unos actos de esta índole? En pleno agosto interrumpieron sus vacaciones y realizaron un trabajo de campo entre muchísimos jóvenes de Ripoll de entre 14 y 21 años hablando, compartiendo, escuchando… Comunicando. Y de aquí surgió este primer documento: ‘17 per capgirar el 17‘. Es una muestra de cómo podemos ayudar a darle una vuelta a las emociones difíciles, después de una vivencia tan impactante.
Montserrat, es una mujer inquieta, que busca continuamente nuevos caminos que ayuden a nuestros niños y niñas a encontrar su sitio en una sociedad cambiante. Preocupada por todo lo que hace referencia a la comunicación educativa, ella misma nos comparte estas preguntas: «¿Cómo establecemos desde los centros puentes entre las familias, los docentes, los alumnos, el entorno?. Y también ¿qué discurso educativo estamos desarrollando? ¿Qué lenguaje estamos utilizando en nuestras aulas?».
Emoción, implicación, vinculación, pasión por su trabajo desde la profesionalidad y el corazón.